miércoles, 30 de mayo de 2012

BLOQUE II

 
“LA ILUSIÓN VITAL”
JEAN BAUDRILLARD
“LA GAYA CIENCIA”
FRIEDRICH NIETZSCHE

Una de las propuestas filosóficas de Nietzsche es la idea nihilista de la humanidad. El nihilismo significa decadencia de la naturaleza humana. Una de las propuestas del filósofo de Sil María, es  sobre todo la idea nihilista de humanidad. La hipótesis que voy a sostener a lo largo del trabajo es la siguiente: que el nihilismo significa  dos cosa. Primero, la caída de la voluntad del ser humano, que el filosofo llama voluntad de poder como tal; y en segundo lugar  para consolidar su caída, el  cristianismo que dice: no a la vida obligada del individuo a  perder lo más valioso de la vida que es lo dionisiaco  y lo apolíneo que es el fundamento y la esencia de la voluntad de poder.
Que significa nihilismo. Nihilismo no solo es el proceso de desvalorización de los valores supremos, sino su aniquilación  y la destrucción progresiva de los valores existentes.
“[…] la superación del nihilismo, se desarrolla a través de su acabamiento en el nihilismo clásico, en una interpretación del ente en su totalidad como voluntad de poder, […][1]
Pero cuáles valores existentes y a qué se estará refiriendo Nietzstche. A los valores como la la razón, la unidad, el fin, y verdad que a lo largo de la historia permean como fundamentos filosóficas. El todo es uno y no hay más, en Parménides; la totalidad absoluta de Hegel y la verdad que se convierte en la falsedad esas son las categorías que hay que sustituir por otras a partir del significado de voluntad de poder, esto es, sustituyendo el nihilismo clásico.
“[…] El nihilismo es entonces el volverse consciente del prolongado despilfarro de fuerza, el tormento de «en vano», la inseguridad, la falta de oportunidad de recurarse de algún modo de sosegarse a propósito de algo, La vergüenza ante sí mismo, como si uno estuviera engañándose durante demasiado tiempo. […]”[2]
     La irrupción del nihilismo marco un movimiento crítico en particular, la caída de la razón, que como se sabe es el paradigma principal de la modernidad socavando uno de los paradigmas de la época. Esto quiere decir que se perdió toda confianza en la razón misma como guía fundamental en las decisiones del ser humano. Para este filósofo el nihilismo represento también el reflejo de una sociedad enfermiza, vayamos al causal de la misma. El cristianismo al sostener una moral  que niega todo instinto natural. Esta prohibición de inhibir los sentidos como los impulsos, las pasiones y de toda manifestación corporal  lleva a la debilidad de la voluntad, que es lo más íntimo de la naturaleza humana. 
     “[…] EL nacimiento de la tragedia fue la primera transvaloración de todos los valores: con esto vuelvo a situarme otra vez en el terreno del que brotan mi querer, mi poder –yo el último discípulo del filósofo Dioniso,- yo, el maestro del eterno retorno.”[3]Zaratustra es el eterno retorno, es su propio destino, es el primero que en enseñar esa doctrina. Como también iba hacer su gran peligro, su destino, y su máxima enfermedad. Vendrá otra vez con este sol, con esta tierra, con esta águila, con esta serpiente, no es vida nueva o una vida mejor una vida semejante:
     “-vendré eternamente de nuevo a esta misma e idéntica vida, en lo más grande y también en lo más pequeño, para enseñar de nuevo el eterno retorno de las cosas,-[4]
     Si la vida es el eterno retorno de lo existente, así como Dioniso es un ser terrenal en donde, el mundo, el ser es su devenir de todas las cosas, el destino es el retorno algo ya existido a lo dionisiaco; la vida no se forma con conceptos abstractos como  Dios, espíritu, el bien, etc. Que son conceptos válidos para una vida apolínea lo contrario a lo dionisíaco.                      En esa vida dionisiaca, la existencia es dura, habla el martillo, donde lo que no nos mata nos hace más fuertes.
     Nietzsche culmina con uno de sus últimos manuscritos, Ecco Homo, cómo se llega hacer lo que se es, en este tema empieza análisis de todo lo que para él, es y ha sido su filosofía.  En este manuscrito plasma su antítesis de toda su vida como filosofo alejándose del  sistema, el personaje de Zaratustra es la antítesis del nihilismo. En ese escrito es más particular, más subjetiva la apreciación de la vida.
“[…] La filosofía, tal y como yo la he entendido y vivido hasta ahora, es la vida voluntaria  en el hielo y en las montañas búsqueda de todo lo problemático y extraño en el existir, de todo lo proscrito hasta ahora por la moral […]”[5]
     Desde la óptica enfermiza, elevar la vista hasta lo más sano y viceversa bajar a lo más bajo; de la plenitud y auto seguridad de la vida rica, bajar los ojos hasta el secreto trabajo de los instintos de decadente.
     Soy la antítesis del decadente, porque elijo los remedios justos contra los malos remedios; en cambio decadente siempre elige los medios que le perjudican. Y para evitar el resentimiento que arrastra a la humanidad al hundimiento pero su opuesto es, el hombre ascético.
     El nihilismo es decadencia  y se caracteriza por el desorden de la vida impulsando al filósofo a crear la el surgimiento de otros valores, transmutación de los valores universales. Esto lo plantea en la obra: El Anticristo donde realiza toda una crítica a la moral cristiana y sus principios son los culpables de la decadencia  y la inhibición de los sentidos del ser humano.
     El cristianismo ha proscrito los instintos fundamentales del hombre, ha hecho una idea de la contradicción de los instintos que son la conservación de la vida fuerte, esto no han perdido; los menos son las víctimas. “[…] El cristianismo quiere hacerse dueño de animales de presa; su medio es ponerlos enfermos, -el debilitamiento es la receta cristiana para la doma, para la ‘civilización’ […]”[6]1 El individuo se corrompe, la especie cuando ha perdido sus instintos (el cristianismo indica lo que es perjudicial a los individuos), donde hay decadencia, falta voluntad de poder.
     Al cristianismo es conocido como la religión de la compasión. La compasión es sinónimo de debilidad; el cristianismo dice compadécete del crucificado, el individuo  es débil por ese hecho: es culpable de algo que no ha hecho. “[…] Nada es menos sano, en medio de nuestra nada sana modernidad, que la compasión del cristianismo. […]”[7]. Si no es el cristianismo, por lo menos no ayuda  que el individuo sea arrastrado al nihilismo. El nihilismo es la declinación de los valores de la vida.    
     Al Dios cristiano se le prohíbe pecar, “[…] La antinatural castración de un Dios para hacer de él un Dios meramente del bien, estaría aquí de todo lo deseable […]”[8] Porque ha ese Dios no se le comprendería. El cristianismo de San Pablo empieza cuando fue crucificado Dios, Jesús de Nazaret, aquí es donde culminan los principios del Dios crucificado y San Pablo  se encargaría de trastornar su religión cristiana; el Dios de San Pablo es la antítesis del Dios cristiano.
     El sacerdote como emancipador de la religión cristiana, tiene un enemigo que es la ciencia y para que el individuo no se preocupe por la ciencia le crea un sentimiento de conciencia poniéndolo en deuda con Dios para que de esta manera interiorice su culpabilidad y lo mantenga en deuda toda la vida, este es el pecado y el individuo, al ser eliminado su interioridad sensible, verá castrada sus instintos.
     Para crear un nuevo sistema primero hay que destruir para construir otro encima de aquél. En la obra: El Anticristo, considerada una de las obras controvertidas, Nietzsche, va a mostrar que deben de crearse otros valores universales que difieran del cristianismo, y en la Genealogía de la moral se realiza un análisis de la moral cristiana.
     La filosofía del filósofo retoma conceptos tanto universales como particulares y esta segunda en lugar de los valores se transvalorarán, creando otros valores externos al mundo religioso, como alternativa antitética a la filosofía de la vida. Creando la antítesis del nihilismo “[…] Pues préstese atención a esto: los años de mi vitalidad más bajo fueron los años en que dejé de ser pesimista: el instinto de autorestablecimiento me prohibió una filosofía de la pobreza y del desaliento. […]”[9]
“[…] Tener que cambiar los instintos –esta es la fórmula de la decadencia; mientras que la vida asciende es felicidad igual a instinto.-“[10] Nietzsche no combate a los instintos para destruirlos, sino para sentir que todavía no ha perdido esos instintos, es decir, la vida se mide por la evolución de los instintos.
     Los sentidos no mienten, lo que nosotros hacemos de su testimonio, lo introducimos en la mentira; lo único que existe es el mundo aparente, el mundo verdadero es una mentira más. En el Crepúsculo de los Ídolos: como el mundo verdadero acaba por convertirse en una fábula. La razón del mundo viene precedida por lo dionisíaco.
     Las pasiones son nefastas en el sentido cristiano, aniquilando a las pasiones. “[…] Pero atacar a las pasiones en su raíz significativa, ataca la vida en su raíz: la praxis de la Iglesia es hostil a la vida […]”[11] Toda moral como imperativo religioso es  corrupto para la vida, es la sinrazón moral. La Iglesia busca por medio del pecado imponer el castigo, para la Iglesia el ser humano es libre nada más para ser juzgado por el sacerdote, lo quiere castigar; el sacerdote infunde el veneno.
     La moral es deber y el no deber es inverso a la moral, pero lo que hace es únicamente empeorar a la humanidad con designios absurdos. “[…].-..Expresándolo en una formula, sería lícito decir: todos los medios con que sea pretendido hasta ahora hacer moral a la humanidad han sido radicalmente inmorales.-”[12]
     La enfermedad fue lo que me condujo a la razón, esta idea está fundamentada por el estado físico de Nietzsche, para él, el clima y el lugar le eran tan indispensables para una total salud, la satisfacción de una buena digestión para realizar sus funciones fisiológicas y sus posteriores  actividades. En todo caso –en la elección de los alimentos, un lugar y clima de recreación- para que reine un instinto de autoconservación que se expresa de la manera más inequívoca en los instintos de autodefensa. “[…]-El ateísmo yo no lo conozco en absoluto como un resultado, menos aún  como un acontecimiento: en mí se da por supuesto, instintivamente. […]”[13] Continuando con la idea del ateísmo, F Nietzsche cita a Stendhal, él me quito el mejor chiste del ateísta. La única disculpa de Dios es que no existe. El filósofo lo menciona en uno de sus manuscritos. “[…] El concepto de ‘Dios’ ha sido hasta ahora la gran objeción contra la existencia […] Nosotros negamos a Dios: sólo así redimimos al mundo.-“[14]
     El hombre egoísta no solo ha superado al animal en cuanto deseos de posesión, sino que lo ha superado en cuando es un egoísta que quiere abarcar más de lo que necesita y son los deseos que arrastran al ser humano a su propia destrucción. Nietzsche es opuesto y se aleja en cuanto a todos esos deseos.
“[…] En mí recuerdo falta el que yo me haya esforzado alguna vez, -no es posible detectar  en mí vida rango alguno lucha, yo soy la antítesis de una naturaleza heroica. ‘Querer’ algo, ‘aspirar’ a algo, proponerse una ‘finalidad’, un ‘deseo’- nada de eso conozco yo por experiencia propia […].Pero así he vivido siempre. […]¡Soy alguien que, habiendo cumplido los cuarenta y cuatro años, puedo decir que no sea esforzado jamás en poseer honor , mujeres y dinero. […]”[15]     “[…] Lo que la humanidad  toma por verdaderas son puras imaginaciones o hablando con mayor rigor, mentiras. […] Todas las cuestiones de la política, de orden social, de la educación han sido hasta ahora falseadas íntegra y radicalmente por el hecho de haber considerado hombres grandes  a los hombres nocivos. “[16]
     Falta en Zaratustra signo de enfermedad, el superhombre es la antítesis del hombre moderno. La antítesis del hombre del siglo XIX,  y los venideros son Zaratustra, el hombre moderno considerado desde el punto de vista cristiano (Genealogía de la Moral), los mas son los victimas del cristianismo nihilista, que se dejan arrastrar por ídolos, sí Dios ha muerto, el sentido de la humanidad no existe.
      Finalmente. El cristianismo es un vicio para la humanidad (al final de El Anticristo); el cristianismo forja una enfermedad social y psicológica de la culpa de conciencia, son creadores de la culpa eterna, por lo que hay que estar en deuda con Dios.
     Nietzsche se pregunta: Cómo combatir a ese enemigo, tanto al cristianismo y valores dominantes. Pues no hay otra fórmula que destruir sus valores y construir otros nuevos, es decir, transvalorar los ya existentes como la verdad platónica. En esto Nietzsche es el destructor por excelencia, tiende más a destruir que a construir.
     El filósofo piensa en un ideal ascético como modelo de excelencia, como espíritu libre, como el ideal ascético de Zaratrustra. Todos tenemos la necesidad de ir en búsqueda  de un asceta, y este ser autentico por su voluntad de poder transvalorará todos los valores para crear los propios. Éste ser es el que tendrá la palabra y hablara por todos los seres humano para desterrar para siempre las consecuencias que debilitan a la voluntad y la vida mismo. Pero este tema es otro de las ideas fundamentales de la obra de F. Nietzsche.

 “EL EXISTENCIALISMO ES UN HUMANISMO”
JEAN-PAUL SARTRE


[1]Heidegger,Martin.Nietzsche,T. II, 2002, p.79
[2](Heidegger, Martin. Nietzsche, T. II, Destino, p. 52
[3]NietzscheF, Crepúsculo del os ídolos,  Trad. A Sánchez  A.E., Madrid, 1992,  p. 136
[4]Nietzsche F., Así habla Zaratustra, A Sánchez Pazcual, A. E., (377), Madrid, 1985, p. 303
[5] Nietzsche F. Ecco homo, A. E. (346), A Sanchez Pascual, Madrid, 1991, p.16
[6]Nietzsche F. El Anticristo, A. E. A. Sanches P. Madrid, 1983, p. 47
[7]Ibid. p. 32
[8]Ibíd. p. 40
[9]Nietzsche F. Ecce Homo, A. E., Pascual, 199, Madrid, p. 24
[10]Nietzsche F., Crepúsculo de los Ídolos, A. E. (467), Madrid, 1992, p. 43.
[11]Ibíd.,  p. 54.)
[12]Ibíd., p. 75
[13] Nietzsche F. Ecco homo, A. E. (346), A Sánchez Pascual, Madrid, 1991,p. 36
[14] Nietzsche F., Crepúsculo de los ídolos, A. E., (467), Madrid, 1992, p. 70
[15]Nietzsche F., Eccco Homo, A. E., (346), A. Sánchez P., Madrid,  1991, p 52.
[16]Ibíd. p. 53.

A)  CONCEPTO DE  EXISTENCIA    DE  J.P. SARTRE

…” Consideremos un objeto fabricado, por ejemplo un libro o un corta papel. Este objeto ha sido fabricado por un artesano que se ha inspirado en un concepto; se ha referido al concepto de corta papel, e igualmente a una técnica de producción previa que forma parte del concepto, y que en el fondo es una receta. Así, el cortapapel es a la vez un objeto que se produce de cierta manera y que, por otra parte, tiene una utilidad definida, y no se puede suponer  un hombre que produjera un cortapapel sin saber para qué  va a servir ese objeto. Diríamos entonces que en el caso del cortapapel, la esencia –es decir, el conjunto de recetas y de cualidades que permiten producirlo y definirlo- precede a la existencia;  y así está  determinada la presencia frente a mí, de tal o cual corta papel, de tal o cual libro. Tenemos aquí, pues una visión técnica del mundo, en el cual se puede decir que la producción precede a la existencia. Al concebir un Dios creador, este Dios se asimila la mayoría de las veces a un artesano superior; y cualquiera que sea la doctrina que consideramos, trátese de una doctrina como la de Descartes o como la de Leibniz, admitimos que la voluntad sigue más o menos  al entendimiento, o por lo menos la acompaña, y que Dios, cuando crea, sabe con precisión lo que crea.  Así el concepto de hombre en el espíritu de Dios es asimilable al concepto de cortapapel en el espíritu del industrial;  y Dios produce al hombre siguiendo técnicas y una concepción, exactamente como el artesano fabrica un cortapapel, siguiendo una definición y una técnica. Así el hombre individual realiza cierto concepto que está en el entendimiento divino.  En el siglo XVIII, en el ateísmo de los filósofos, la noción de Dios es suprimida, pero no pasa lo mismo con la idea de que la esencia precede a la existencia. Esta idea  la encontramos un poco en todas partes: la encontramos en Diderot, en Voltaire y aun en Kant. El hombre es poseedor de una naturaleza humana, que es el concepto humano, se encuentra en todos los hombres, lo que significa que cada hombre es un ejemplo particular de un concepto universal, el hombre;  en Kant resulta de esta universalidad que tanto el hombre de los bosques, el hombre de la naturaleza, como el burgués, están sujetos a la misma definición y poseen las mismas cualidades básicas. Así, pues, aquí también la esencia del hombre precede a esa existencia histórica que encontramos en la naturaleza.

         El existencialismo ateo que yo represento es más coherente. Declara que si Dios no existe, hay por lo menos un ser  en el que la existencia precede a la esencia, un ser que existe antes de poder ser definido por ningún concepto, y que este ser es el hombre, o como dice Heidegger, la realidad humana. ¿Qué significa que la existencia precede a la esencia?  Significa que el hombre empieza por existir, se encuentra,  surge en el mundo, y después se define. El hombre, tal como lo concibe el existencialista, si no es definible, es porque empieza por no ser nada: Sólo será después,  y será tal como se haya hecho. Así pues, no hay naturaleza humana, porque no hay Dios para concebirla. El hombre es el único que no sólo es tal como él se concibe, sino tal como el se quiere, como el se concibe después de la existencia, como se quiere después de este impulso hacia  la existencia;  el hombre no es otra cosa que lo que él se hace. Este es el primer principio del existencialismo”…

Pp10-12
B)   CONCEPTO DE LIBERTAD DE J.P. SARTRE

...” Haremos, por lo tanto, un pequeño trabajo que permitirá demostrar que estos valores existen, a pesar de todo, inscritos en un cielo inteligible, aunque, por otra parte, Dios no exista. Dicho en otra forma -y es, según creo yo, la tendencia de todo lo que se llama en Francia radicalismo-, nada se cambiará aunque Dios no exista; encontraremos las mismas normas de honradez, de progreso, de humanismo, y habremos hecho de Dios una hipótesis superada que morirá tranquilamente y por sí misma. El existencialista, por el contrario, piensa que es muy incómodo que Dios no exista, porque con él desaparece toda posibilidad de encontrar valores en un cielo inteligible; ya no se puede tener el bien a priori, porque no hay más conciencia infinita y perfecta para pensarlo; no está escrito en ninguna parte que el bien exista, que haya que ser honrado, que no haya que mentir; puesto que precisamente estamos en un plano donde solamente hay hombres. Dostoievsky escribe: "Si Dios no existiera, todo estaría permitido". Este es el punto de partida del existencialismo. En efecto, todo está permitido si Dios no existe y, en consecuencia, el hombre está abandonado, porque no encuentra ni en sí ni fuera de sí una posibilidad de aferrarse. No encuentra ante todo excusas. Si, en efecto, la existencia precede a la esencia, no se podrá jamás explicar la referencia a una naturaleza humana dada y fija; dicho de otro modo, no hay determinismo, el hombre es libre, el hombre es libertad. Si, por otra parte, Dios no existe, no encontramos frente a nosotros valores u órdenes que legitimen nuestra conducta. Así, no tenemos ni detrás ni delante de nosotros, en el dominio luminoso de los valores, justificaciones o excusas. Estamos solos, sin excusas. Es lo que expresaré diciendo que el hombre está condenado a ser libre. Condenado, porque no se ha creado a sí mismo, y sin embargo, por otro lado, libre, porque una vez arrojado al mundo es responsable de todo lo que hace.
El existencialista no cree en el poder de la pasión. No pensará nunca que una bella pasión es un torrente devastador que conduce fatalmente al hombre a ciertos actos y que por consecuencia es una excusa; piensa que el hombre es responsable de su pasión. El existencialista tampoco pensará que el hombre puede encontrar socorro en un signo dado sobre la tierra que lo oriente; porque piensa que el hombre descifra por sí mismo el signo como prefiere. Piensa, pues, que el hombre, sin ningún apoyo ni socorro, está condenado a cada instante a inventar al hombre. Ponge ha dicho, en un artículo muy hermoso: "el hombre es el porvenir del hombre". Es perfectamente exacto.”…

   pp. 17-19
C)   CONCEPTO DE RESPONSABILIDAD  DE J.P. SARTRE

…”Pero si verdaderamente la existencia precede a la esencia, el hombre es responsable de lo que es. Así, el primer paso del existencialismo es poner a todo hombre en posesión de lo que es, y asentar sobre él la responsabilidad total de su existencia. Y cuando decimos que el hombre es responsable de sí mismo, no queremos decir que el hombre es responsable de su estricta individualidad, sino que es responsable de todos los hombres. Hay dos sentidos de la palabra subjetivismo, y nuestros adversarios juegan con los dos sentidos. Subjetivismo, por una parte, quiere decir elección del sujeto individual por sí mismo, y por otra, imposibilidad para el hombre de sobrepasar la subjetividad humana. El segundo sentido es el sentido profundo del existencialismo. Cuando decimos que el hombre se elige, entendemos que cada uno de nosotros se elige, pero también queremos decir con esto que, al elegirse, elige a todos los hombres. En efecto, no hay ninguno de nuestros actos que, al crear al hombre que queremos ser, no cree al mismo tiempo una imagen del hombre tal como consideramos que debe ser. Elegir ser esto o aquello es afirmar al mismo tiempo el valor de lo que elegimos, porque nunca podemos elegir mal; lo que elegimos es siempre el bien, y nada puede ser bueno para nosotros sin serlo para todos. Si, por otra parte, la existencia precede a la esencia y nosotros quisiéramos existir al mismo tiempo que modelamos nuestra imagen, esta imagen es valedera para todos y para nuestra época entera. Así, nuestra responsabilidad es mucho mayor de lo que podríamos suponer, porque compromete a la humanidad entera. Si soy obrero, y elijo adherirme a un sindicato cristiano en lugar de ser comunista; si por esta adhesión quiero indicar que la resignación es en el fondo la solución que conviene al hombre, que el reino del hombre no está en la tierra, no comprometo solamente mi caso: quiero ser un resignado para todos; en consecuencia, mi proceder ha comprometido a la humanidad entera. Y si quiero -hecho más individual- casarme, tener hijos, aun si mi casamiento depende únicamente de mi situación, o de mi pasión, o de mi deseo, con esto no me encamino yo solamente, sino que encamino a la humanidad entera en la vía de la monogamia. Así soy responsable para mí mismo y para todos, y creo cierta imagen del hombre que yo elijo; eligiéndome, elijo al hombre.”…
                                                                                                                                          pp. 13-14
D)  CONCEPTO DE ANGUSTIA DE J.P. SARTRE

…”Esto permite comprender lo que se oculta bajo palabras un tanto grandilocuentes como angustia, desamparo, desesperación. Como verán ustedes, es sumamente sencillo. Ante todo, ¿qué se entiende por angustia? El existencialista suele declarar que el hombre es angustia. Esto significa que el hombre que se compromete y que se da cuenta de que es no sólo el que elige ser, sino también un legislador, que elige al mismo tiempo que a sí mismo a la humanidad entera, no puede escapar al sentimiento de su total y profunda responsabilidad. Ciertamente hay muchos que no están angustiados; pero nosotros pretendemos que se enmascaran su propia angustia, que la huyen; en verdad, muchos creen al obrar que sólo se comprometen a sí mismos, y cuando se les dice: pero ¿si todo el mundo procediera así? se encogen de hombros y contestan: no todo el mundo procede así. Pero en verdad hay que preguntarse siempre: ¿que sucedería si todo el mundo hiciera lo mismo? Y no se escapa uno de este pensamiento inquietante sino por una especie de mala fe. El que miente y se excusa declarando: todo el mundo no procede así, es alguien que no está bien con su conciencia, porque el hecho de mentir implica un valor universal atribuido a la mentira. Incluso cuando la angustia se enmascara, aparece. Es esta angustia la que Kierkegaard llamaba la angustia de Abraham. Conocen ustedes la historia: un ángel ha ordenado a Abraham sacrificar a su hijo; todo anda bien si es verdaderamente un ángel el que ha venido y le ha dicho: tú eres Abraham, sacrificarás a tu hijo. Pero cada cual puede preguntarse; ante todo, ¿es en verdad un ángel, y yo soy en verdad Abraham? ¿Quién me lo prueba? Había una loca que tenía alucinaciones: le hablaban por teléfono y le daban órdenes. El médico le preguntó: Pero ¿quién es el que habla? Ella contestó: Dice que es Dios. ¿Y qué es lo que le probaba, en efecto, que fuera Dios? Si un ángel viene a mí, ¿qué me prueba que es un ángel? Y si oigo voces, ¿qué me prueba que vienen del cielo y no del infierno, o del subconsciente, o de un estado patológico? ¿Quién prueba que se dirigen a mí? ¿Quién me prueba que soy yo el realmente señalado para imponer mi concepción del hombre y mi elección a la humanidad? No encontraré jamás ninguna prueba, ningún signo para convencerme de ello. Si una voz se dirige a mí, siempre seré yo quien decida que esta voz es la voz del ángel; si considero que tal o cual acto es bueno, soy yo el que elegiré decir que este acto es bueno y no malo. Nadie me designa para ser Abraham, y sin embargo estoy obligado a cada instante a hacer actos ejemplares. Todo ocurre como si, para todo hombre, toda la humanidad tuviera los ojos fijos en lo que hace y se ajustara a lo que hace. Y cada hombre debe decirse: ¿soy yo quien tiene derecho de obrar de tal manera que la humanidad se ajuste a mis actos? Y si no se dice esto es porque se enmascara su angustia. No se trata aquí de una angustia que conduzca al quietismo, a la inacción. Se trata de una simple angustia, que conocen todos los que han tenido responsabilidades. Cuando, por ejemplo, un jefe militar toma la responsabilidad de un ataque y envía cierto número de hombres a la muerte, elige hacerlo y elige él solo. Sin duda hay órdenes superiores, pero son demasiado amplias y se impone una interpretación que proviene de él, y de esta interpretación depende la vida de catorce o veinte hombres. No se puede dejar de tener, en la decisión que toma, cierta angustia. Todos los jefes conocen esta angustia. Esto no les impide obrar: al contrario, es la condición misma de su acción; porque esto supone que enfrentan una pluralidad de posibilidades, y cuando eligen una, se dan cuenta que sólo tiene valor porque ha sido la elegida. Y esta especie de angustia que es la que describe el existencialismo, veremos que se explica además por una responsabilidad directa frente a los otros hombres que compromete.

No es una cortina que nos separa de la acción, sino que forma parte de la acción misma. Y cuando se habla de desamparo, expresión cara a Heidegger, queremos decir solamente que Dios no existe, y que de esto hay que sacar las últimas consecuencias.”…                                                                                                                                    

pp. 14-17
3. Contextualizar  con la problemática situada.

 Los temas de esta lectura: la libertad, el hombre es lo que hace, la responsabilidad y la angustia, etc.  se  relacionan con la problemática situada  “Dime cuánto  tienes y te diré quien eres”, en cuanto que Sartre nos dice que el hombre es lo que hace y en la actualidad “somos lo que tenemos”, el alumno reflexionará sobre esto y tomará su propia postura sobre su ser, si está en crisis su existencia, etc. Además, al aclarar estos mismo términos, podrá  reflexionar o tratar de contestar las preguntas de la problemática sugerida:  ¿Cuál es la diferencia entre ontología del Ser y una referente al Tener?, ¿Cómo le podemos dar sentido a la crisis de la existencia del hombre contemporáneo que se debate entre el ser, el tener y el poder? Y ¿De qué manera, en el contexto de la globalización, podemos comprendernos, reconocernos y formarnos como seres humanos libres y con identidad propia?.



 “EL HOMBRE UNIDIMENSIONAL”
HERBERT MARCUSE

El presente análisis a la obra citada abarcará dos aspectos:
a)    Una exposición hecha por el profesor para profesores y
b)   Otra exposición para el aula con sus respectivas modificaciones

La razón de ello obedece a las dificultades que  ofrece la filosofía como ciencia rigurosa abstracta facilitando la comprensión de la misma a los alumnos con las estrategias, métodos y análisis pertinentes. Hechas estas salvedades naturalmente, cada profesor aportará  su propio método en el aula, sin que esto se considere un caos por ejercer su propia libertad para exponer.
Marco Expositivo para profesores.
El título de la obra: “El triunfo del pensar positivo a lude a un tipo de filosofía que se erige desde el renacimiento como dogma supremo, esto es, la razón ilustrada y en  el siglo XIX la razón instrumental, la razón como forjadora del dominio del hombre.
Frente a otro tipo de saberes que parecen excluyentes, frente a este hecho, sarcásticamente pregonamos entonces, la muerte de otros saberes.
Por qué tanto icono con el objeto más importante de la madre filosofía?
Elaboremos alguna tesis para fundamentar y / o  rechazar tal hecho si el objeto es la razón es el pensamiento, el logos griego, como hemos de hacerlo comprensible para el objeto del pensar es el lenguaje y esto es porque parecería que afecta al pensar positivista, negamos un lenguaje univoco, eficiencia y filosofía para entender el mundo, la realidad, dios, en fin. Dejemos aquello de lo que no se puede hablar, quizá porque toda comprensión de la realidad entraña lenguaje univoco
Bajo este aspecto, las ciencias positivas se erigen en ciencias y aquellas que no entran en sus parámetros cuantitativos, no son creencias si no seudociencias.
Por otra parte, consideramos algunos hechos históricos para ir adentrándonos al problema al que alude el título Marcuse perteneció a la escuela de Frankfort, originando en Viena, años después del fin de la 1ra. Guerra mundial, alcanza su madurez en 1929 cuando el mundo se agita con el circulo de Viena, filosófico, recordemos que Carnap, Otto Neurath y Hans Hahn esbozan el programa del círculo. Todos estos filósofos, manifiestan hostilidad hacia la metafísica especulativa y hacia la metafísica del idealismo alemán, otro aspecto a considerar es la defensa que hacen del Empirismo cultivado por  Hume, se quejaban de la poca atención que los empiristas tradicionales habían dado a la lógica y a la matemática.
Frente a estos hechos que nos relacionan con Marcuse y su crítica al pensar positivamente, la crítica más acérrima seria:
“Los libros filosóficos y antes todo los libros metafísicos se hayan atiborrados de enunciados sin sentido”
Que es ser, Existe Dios?, Cual es el sentido de la vida?
Estas cuestiones son insolubles, carecen de significado, entonces que tipo de enunciados nos dan razón del mundo frente a este hecho, la pluralidad del lenguaje enriquece la visión del mundo precisamente entonces si se ha dado desde el inicio en otras culturas, el mito, como forma de interpretar la realidad, el símbolo, la poesía, el arte, en fin, parecía un error hablar del reduccionismo del lenguaje. Frente a este hecho, también propugnemos la muerte del pensar mítico, mágico, el arte, la poesía etc. O aboguemos  por nuevas formas de comprensión de la realidad a través de nuevos lenguajes, no porque la razón lógica, no da comprensión de aspectos metafísicos, teológicos, sus datos carecen de cientificidad.
Precisamente, escribió ayer, las proposiciones filosóficas, en su defensa del positivismo lógico, no son fácticas sino lingüísticas, es decir, no describen el comportamiento de objetos físicos, o , si quiera síquicos, expresan definiciones. Se había alegado que la proposición según la cual ninguna proposición tiene sentido al menos de ser en principio empíricamente verificable y por tanto carece de sentido como Wittgenstein escribió la filosofía no es una doctrina, es una actividad.
Por otra parte Se basaba la verificación únicamente en impresiones sensibles?
Resulta paradójico y hasta visible que los científicos positivistas que y tanto rechazan la columna vertebral dela filosofía como es la metafísica por ser insoluble, estén planteando en sus investigaciones problemas metafísicos como una tentativa de respuesta a la presente lectura no nos queda más que abogar por una pluralidad de formas de pensamiento sin ser excluyentes
El mundo es del hombre y la comprensión del mundo no atañe solo a científicos o a los filósofos si no por su misma esencia el hombre es un ser que se interroga sobre el mismo a que su comprensión no abarque grandes teorías científicas para abarcar el infinito, el absoluto, dios , la realidad.
Ahora, abordaremos algunos aspectos metodológicos para integrarlos a nuestra práctica educativa.
Primeramente:
La ubicación en el núcleo temático en la unidad #1
Filosofía de la vida y ciencia
Ciencia, progreso y tecnología
Manera de abordar el contenido a partir de conceptos clave que el profesor considere pertinentes en la lectura del texto por ejemplo
Empirismo
Ciencia
Análisis lingüístico
Filosofía
Contexto histórico del pensador abordado
Instrumento de evaluación
Se pedirá un breve ensayo de una cuartilla, integrando los conceptos de la lectura del texto ) que también el profesor puede usar otra forma de evaluación)
Problemática situada
Que el  alumno cuestione, discuta y logre integrar a su campo perceptivo y vivencia cotidiana, las repercusiones de la ciencia y tecnología en este siglo
Finalmente en relación al tiempo asignado al tema abordado daríamos a manera de tentativa abordándolo en 2 clases, en cuanto a fuentes de información, el texto de copias proporcionadas, material copias proporcionadas para los alumnos.
En el ensayo propuesto para evaluación el profesor utilizará la solución del trabajo para que los alumnos intercambien y revisen su propio esquema con sus aclaraciones pertinentes y se tomaría para evaluación formativa.

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